¿Qué son los ronquidos nocturnos?
El ronquido es el ruido que se da cuando se produce una obstrucción en las vías respiratorias durante el sueño y son producidos por turbulencias provocadas por el aire al pasar por los estrechamientos de la nariz y la faringe mientras se duerme.
¿Qué tan frecuentes son los ronquidos?
Este es un problema que afecta a mayores de 40 años y en mayor medida a los hombres (el 50% de los hombres roncan y el 25% de las mujeres también) y a las personas que tienen sobrepeso. Los niños y jóvenes también pueden ser roncadores.
¿Tienen algún riesgo para la salud los ronquidos?
Cuando la frecuencia y la intensidad de los ronquidos son muy leves, no suele causar problemas mayores ni requerir de tratamiento. Sin embargo, algunas personas presentan potentes ronquidos, que pueden afectar al descanso personal y familiar, alterando el sueño y dando lugar a otros problemas como déficit de descanso, irritabilidad o falta de concentración. Además, los grandes roncadores suelen tener una presión arterial más alta debido a la mencionada falta de sueño y descanso.
¿Qué es la apnea del sueño?
En todo paciente con ronquidos severos se puede producir un cuadro llamado Apnea del Sueño, que se da cuando la respiración ruidosa del ronquido se interrumpe por episodios de cese de la respiración por más de 10 segundos, debido a un colapso de la vía aérea superior.
¿Cuáles son las causas?
La apnea obstructiva del sueño se da cuando los músculos que se encuentran en la parte posterior de la garganta se relajan. En cuanto se relajan, las vías respiratorias se reducen o cierran al inspirar, impidiendo realizar inspiraciones adecuadas, lo cual reduce el nivel de oxígeno en la sangre.
¿Cuáles son las consecuencias del ronquido con apnea del sueño?
El ronquido puede provocar resequedad bucal y dolor de garganta, pero cuando hay Apnea del Sueño produce además: somnolencia diurna, cansancio o fatiga crónica, irritabilidad, apatía, depresión, “ahogos o asfixias” nocturnos, cefalea matutina, pérdida de capacidad intelectual, memoria y concentración, micción nocturna, alteración de la libido e impotencia. Así como la aparición de Hipertensión Arterial, Diabetes Mellitus, Arritmias, Cardiopatía Isquémica, Accidentes Cerebrovasculares, Hipertensión Pulmonar y Alteraciones Metabólicas.
¿Existe algún tipo de medida preventiva?
La apnea del sueño no se puede prevenir de forma definitiva, pero hay algunas pautas que se pueden seguir para disminuir el riesgo: se debe cambiar algunos hábitos como, por ejemplo: bajar de peso, evitar el alcohol, tabaco y somníferos, tratar de no dormir boca arriba, comer sano y tener buena hidratación, realizar ejercicio de forma frecuente, controlar enfermedades crónicas y tener sus chequeos médicos regulares.
¿Qué especialidades manejan la apnea del sueño?
En el tratamiento de la apnea del sueño pueden participar un equipo multidisciplinario, entre los que encontramos especialistas en Otorrinolaringología, Neumología, Cardiología, Neurología, Endocrinología, Cirugía Maxilo-Facial, Nutrición y Alergología.
¿Qué se busca en el examen de otorrinolaringología?
Se debe hacer una adecuada historia clínica para detectar factores de riesgo para Apnea y evaluar toda la vía respiratoria superior con evaluación endoscópica (Nasofaringolaringoscopia) descartando alguna obstrucción por problemas de válvula nasal, cornetes, septum nasal, tumores o pólipos nasales, adenoides y amígdalas, paladar, base de lengua, mandíbula y laringe. Y ante la sospecha se debe confirmar con un Estudio del Sueño (Polisomnografía o Poligrafía Respiratoria)
¿En qué consiste el tratamiento?
El especialista determinará el tratamiento en cada caso.
El tratamiento principal en la apnea del sueño Moderada-Severa es el CPAP (presión positiva continua en las vías respiratorias), consiste en colocar durante el sueño, una máscara especial sobre la boca y la nariz. Esta máscara mantiene abiertas las vías respiratorias mediante la adición de presión al aire que el paciente respira.
También se pueden utilizar algunos dispositivos dentales (DAM Dispositivos de Avance Mandibular) como tratamiento para casos seleccionados de apnea obstructiva del sueño. Estos dispositivos facilitan la respiración, al mover la mandíbula hacia adelante.
En casos menos frecuentes, se puede precisar la realización de una cirugía de nariz, amígdalas, paladar o el tejido extra de la garganta.
Para determinar las posibles causas y un adecuado tratamiento del ronquido, se le recomienda que sea evaluado por un especialista en otorrinolaringología.